Como la piedra teñida de arsénico

Arsénico parto de aquí

Con la voz gris

Con la tos adosada al llanto

Con las piernas pegadas y el cuello cubierto de cobre

Mira como se multiplican las casitas

Como cada cuadra se replica

Como los modelos se perpetúan

Como las piedras las deslizan

Así, con las manos negras y vacías

Con los chalecos rotos en la maleta

Con las camisas blancas y los cuellos negros

Los ojos amarillos y el bigote cansado

Así me veo, así me parezco

Como una gota de agua

Agua salada y mineral

Con el esófago lleno de sarro

Con los pulmones colgados

Y los diente ya sin raíces.


Que se jodan todxs menos .

Juana, la más loca, descarriada y dulce
La reina de las perras blancas
La más gloriosa vagabunda insomne.
Perdida en la inmensidad de su ego
En la sorpresa de la dicha,
En la excusa para un suicidio
Y en la forma en cómo redactar su testamento.
Distinta desde la tripa de la madre
Madre sola, padre solo, mas mujer que nadie.
Desde su nuca brotó la ondulación violeta
Que no le permitió conciliar por 3 meses
La dicotomía de su vida.
Y en recuerdos de infancia esta la respuesta
En las monjas de los pasillos
En los llantos de los 7 años
En la única pelea de su vida
En la primera mujer de su memoria.
Juana, tan dúctil, y versátil, tan honesta
Tan misteriosa y atormentada
Siempre lo fuiste, siempre
Y no juegues ahora a hacerte la tonta.

Y te oigo, porque resbalo desde tu oído(...)

Y continuo, beso todas las ondulaciones crepusculares

Tus bendiciones, tu sensibilidad(...).

Me muevo y tú me oyes

Me recoges del mar a punto de caer,

Cae tu boca en mi pecho(...).

Las alineaciones planetarias

Esta noche han sido las responsables.



Me resbalo por barro de la acera

Esperando que la lluvia no moje ninguna de mis ideas

Me deslizo por tu boca, tu cara

Suave y dulce como una roca

Dulce, suave, fría, imaginaria.

Me escabullo de la lluvia

Para que ningún insecto ruede al reparo/

De mi cuerpo para no ser atravesado por un espada liquida.

Y estas tú, esta vez te espero

Libre como insecto en tierra fértil

Suave como mujer

Insensible como mujer

Frívola (no) como yo.

Y te espero, con las ansias de la primera vez

De rozar las extremidades envueltas (tersas)

Caminar por tu lengua

Con la mayor de las ingenuidades

Con la menor de las vergüenzas

Con el mayor de los deseos.


Me corte los brazos entre los barrotes de fina hierba.


Pies descalzos y manitos heladas

La cara redonda de la niña

Acicala al firme pecho de la mujer

¡Quienes han de ser estas!

Grita con espanto mientras se lastima el cerebro

Con tanto corte y la vista oscura y con desprecio.

Aguanta, que les aconsejaron volverse en 3 años más

Cuando la dilatación mental sea feroz

Y cuando el deseo de regreso

Este perdido en medio de Paris, Londres o Berlín.

La descripción, la fabula abierta

El libro que leo todas las mañanas, no me desprecia.

Tu placer, la boca que cubre la mía

Esta vez sin rabia, sin prisa

Sin mentiras ni celos

Con colores, con fluidos en las techumbres de noche gris

Movimientos cálidos enfurecen la noche roja

Ojos derribados por las manos que me cubren.

Que limpia, pura y regenerada me he sentido

Gloriosa, poética y hermosa

Me devoraría como a un chocolate relleno de la más bella sangre

De la más pura miel de mora

Pura como tu mano, sucia como tu mano

Rodean mis dedos, frente cabeza cuello

Cuello que ha recibido en su dosis más exquisita

El mejor de los vinos, el mejor de los dolores

El mejor de los sabores, la mejor agua de mar

Salada como ambos después de sudar.

Y ahora, retratos construidos

Metáfora mágica de mi cerebro

Cerebro que nunca será metáfora

Metáfora del presente -futuro-.


Verborrea coagulada que fluyes por mi garganta

Nerviosismo creciente, determinante de la pierna temblorosa

Sismo de nervio palmar y desde el mar.

Música ambiente y desacelero, cuantos nombres cuantos días

Juana, María, Virginia, Teresa

Basta de retratos, basta de interpretaciones

No me juzguen no me golpeen no me agiten

Basta. Las manos sudan por lo menos una vez al día

El suero corre por las venas a lo menos una vez al día

Los hilos del cerebro tiemblan a lo menos una vez al día

La duda crece y decrece a lo menos una vez al día

La adrenalina se desborda a lo menos una vez al día.

Basta. La sangre corre rápido y fuerte por las arterias

El suero se escapa por las piernas, las manos y la cara

Limpia, cargada y descargada, con frigidez mental

Con dramatismo precoz y timidez impotente viviendo en la garganta.

Me tiemblan las manos, café sin azúcar por favor

La boca expulsa jengibre, la nariz toronjil. Calma.

Las pulsaciones me llevan. Control de la respiración.

Hacer listas. Calma.


Viajar por la letra que pulsa con fuerza en la cabeza

Poesía corta, verso chueco, letra tuerta

Ansiosa por flagelar mas de una pierna sin vellos

Más de una axila con miedo al miedo.

Dos peldaños de las escalan suenan como relámpagos en enero

Corriendo por rio abajo sonando como piedras por el

-cuando el rio suena es porque piedras trae-

De la baranda rota me afirmo

Depositando la poca confianza que me queda

Y caigo, rompo más de mis 2 órganos

Goteo, goteo, yo goteo suero.

Con la nariz mas clama refuto ideas

Sin encontrar por quien botar una bola de lana al suelo

Sin pensar me distraigo, salgo, salgo.

Acordeón en mis manos, no me destruyas las esperanzas.


Hay muchas cosas que me tuercen las tripas

Me revuelven las viseras

Me hacen sudar las manos

Palpitar el cerebro

Sangrar la nariz

Y preguntarme si...

Desarticularme el cerebro

Desenrollarme las tripas

Sudar la entrepierna

Palpitar la frente

Sangrar la lengua

Doler la cabeza

Y disparar el flash

Es de las muchas o de las pocas cosas.